Falta actas nacimiento impide jóvenes y niños ir escuela
POR SHIRA ABREU
PEDRO BRAND-. Si se toma en cuenta que la educación es el futuro de los pueblos, el futuro del municipio Pedro Brand es incierto o poco alentador. A muchos niños y jóvenes de aquí se les dificulta estudiar porque carecen de actas de nacimiento y se ven obligados a abandonar la escuela, impedidos de obtener empleos bien remunerados.
Sus madres, en tanto, piden a los maestros oportunidades tras oportunidades, para que los chicos puedan seguir estudiando hasta que obtengan los documentos, porque en muchos casos ellas, sus padres, abuelos y hasta tatarabuelos nunca tuvieron documentos que les identificaran.
Los trámites de declaración tardía, aparte de largos y complicados, son costosos y hasta inalcanzables para una población semirural de escasos recursos como la de Pedro Brand.
Ayer muchas madres se quejaron de que en el liceo General Guegorio Luperón y en la escuela La Cuaba les impedían el ingreso a su hijos y pidieron a la Junta Central Electoral iniciar en Pedro Brand el proyecto de declaraciones tardías que han prometido llevar pueblo por pueblo para proveer "identidad" a más de 600 mil dominicanos que viven sin ningún tipo de registro, por lo cual se les conoce como "muertos civiles".
La directora de la escuela La Cuaba, Quircia Buret, desmintió que nieguen la educación a niños indocumentados, aunque reconoció que este año han sido más "rígidos" solicitando actas de nacimiento. Explicó que cumplen disposiciones del distrito escolar al que pertenecen de que requieran los documentos principalmente en octavo grado porque son indispensables para las pruebas nacionales.
Informó que en ese centro alrededor del 30 por ciento no tiene registro de nacimiento.
En un recorrido por las secciones Piedra Gorda, Franquito Gómez, Salamanca, La Cuaba, Palamara, Los García y el barrio El Paraíso reporteros de El Nacional constataron la angustia de muchas madres que ven que sus hijos se quedan rezagados en séptimo y octavo de la primaria, porque para continuar les exigen documentos. Muchas no saben qué hacer para tramitarlos y otras dijeron que no pueden pagarlos porque en la mayoría de los casos hay que invertir ocho, diez o 15 mil pesos.
Maestros y directores de escuelas de los referidos poblados explicaron ayer que permiten a los niños estudiar aunque carezcan de documentos, pero que cuando llegan a octavo o cuarto de bachillerato es imposible promoverlos porque necesitan identificaciones para poder ser validados en las pruebas nacionales.
De acuerdo a cifras del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés), citadas el jueves por BBC Mundo en su página Web, en América Latina y el Caribe uno de cada seis menores de 5 años no cuenta con certificado de nacimiento, y en Pedro Brand cinco de cada diez niños entre uno y 10 años tienen el mismo problema, de acuerdo a datos levantados por la Federación de Asociaciones de Mujeres de éste municipio.
Quien no tiene documentos no existe para el Estado, no es tomado en cuenta para presupuestos, no los incluyen en planes de asistencia social, tampoco pueden gozar del seguro de salud que inicia desde hoy, no tiene el derecho al voto ni acceso a los planes de pensiones, se le dificulta obtener trabajo y mucho menos estudiar en universidades, entre tantos beneficios de cualquier ciudadano.
El recorrido por Pedro Brand, realizado en compañía de la presidente de la Federación de Mujeres, licenciada Claudia Pérez, estuvo plagado de súplicas de los munícipes que esperanzados le preguntaban insistentemente a ella si ya les iban a "sacar los papeles". Ella se propuso ayudar a la comunidad a salir de ese problema que arrastra el pueblo generación tras generación.
"Menos protocolo y más acción"
Fue la sugerencia hecha por el director de la Escuela Básica Piedra Gorda, licenciado Lorenzo Deas, a las autoridades del registro civil.
El educador entiende que muchos padres se descuidan quizás por ignorancia principalmente en las zonas rurales, donde siempre ha habido mucha deficiencia.
Dijo que ahora es que la población entiende la importancia de estar documentado.
Indicó que si en la escuela que dirige cerraran las puertas a todos los niños sin documentos entonces tendrían que cerrar el centro, fundado en 1978 y que acoge a 240 estudiantes desde el primero hasta el séptimo de la primaria.
Explicó que como allí no imparten el octavo grado cualquier pequeño puede estudiar. Expresó que él no puede cerrarle las puertas a alguien que quiera capacitarse.
Asimismo, el director de la escuela básica de la sección Salamanca, Domingo Valenzuela, dijo que en ese poblado está muy presente el problema de que niños y adultos no tienen documentos.
Reconoció que muchos niños no están declarados por descuidos de los padres, pero lamentó más que impidan estudiar a jóvenes y niños que así lo quieren.
Cuando se esparció la noticia de estaban haciendo un reportaje de los que no tenían "papeles", más de medio centenar de personas, entre niños y adultos se reunieron en la escuela de Salamanca para explicar sus casos particulares.
Se observó que algunos eran haitianos o de padres haitianos, quienes también pidieron algún tipo de registro para poder estudiar.
Pérez dijo que mantiene la esperanza de que el presidente de la JCE, doctor Julio César Castaños Guzmán, le cumpla la promesa que, asegura, le hizo el magistrado durante las consultas a la reforma constitucional.
Dice que no descansará, mientras que los residentes de Pedro Brand no hacen más que preguntarle, cada vez que la ven, sobre el estudio que ella hizo. Todo el que fue entrevistado espera pronto tener un papel que asiente en las memorias de la Nación que ellos tienen nombre y apellido.
Sus madres, en tanto, piden a los maestros oportunidades tras oportunidades, para que los chicos puedan seguir estudiando hasta que obtengan los documentos, porque en muchos casos ellas, sus padres, abuelos y hasta tatarabuelos nunca tuvieron documentos que les identificaran.
Los trámites de declaración tardía, aparte de largos y complicados, son costosos y hasta inalcanzables para una población semirural de escasos recursos como la de Pedro Brand.
Ayer muchas madres se quejaron de que en el liceo General Guegorio Luperón y en la escuela La Cuaba les impedían el ingreso a su hijos y pidieron a la Junta Central Electoral iniciar en Pedro Brand el proyecto de declaraciones tardías que han prometido llevar pueblo por pueblo para proveer "identidad" a más de 600 mil dominicanos que viven sin ningún tipo de registro, por lo cual se les conoce como "muertos civiles".
La directora de la escuela La Cuaba, Quircia Buret, desmintió que nieguen la educación a niños indocumentados, aunque reconoció que este año han sido más "rígidos" solicitando actas de nacimiento. Explicó que cumplen disposiciones del distrito escolar al que pertenecen de que requieran los documentos principalmente en octavo grado porque son indispensables para las pruebas nacionales.
Informó que en ese centro alrededor del 30 por ciento no tiene registro de nacimiento.
En un recorrido por las secciones Piedra Gorda, Franquito Gómez, Salamanca, La Cuaba, Palamara, Los García y el barrio El Paraíso reporteros de El Nacional constataron la angustia de muchas madres que ven que sus hijos se quedan rezagados en séptimo y octavo de la primaria, porque para continuar les exigen documentos. Muchas no saben qué hacer para tramitarlos y otras dijeron que no pueden pagarlos porque en la mayoría de los casos hay que invertir ocho, diez o 15 mil pesos.
Maestros y directores de escuelas de los referidos poblados explicaron ayer que permiten a los niños estudiar aunque carezcan de documentos, pero que cuando llegan a octavo o cuarto de bachillerato es imposible promoverlos porque necesitan identificaciones para poder ser validados en las pruebas nacionales.
De acuerdo a cifras del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés), citadas el jueves por BBC Mundo en su página Web, en América Latina y el Caribe uno de cada seis menores de 5 años no cuenta con certificado de nacimiento, y en Pedro Brand cinco de cada diez niños entre uno y 10 años tienen el mismo problema, de acuerdo a datos levantados por la Federación de Asociaciones de Mujeres de éste municipio.
Quien no tiene documentos no existe para el Estado, no es tomado en cuenta para presupuestos, no los incluyen en planes de asistencia social, tampoco pueden gozar del seguro de salud que inicia desde hoy, no tiene el derecho al voto ni acceso a los planes de pensiones, se le dificulta obtener trabajo y mucho menos estudiar en universidades, entre tantos beneficios de cualquier ciudadano.
El recorrido por Pedro Brand, realizado en compañía de la presidente de la Federación de Mujeres, licenciada Claudia Pérez, estuvo plagado de súplicas de los munícipes que esperanzados le preguntaban insistentemente a ella si ya les iban a "sacar los papeles". Ella se propuso ayudar a la comunidad a salir de ese problema que arrastra el pueblo generación tras generación.
"Menos protocolo y más acción"
Fue la sugerencia hecha por el director de la Escuela Básica Piedra Gorda, licenciado Lorenzo Deas, a las autoridades del registro civil.
El educador entiende que muchos padres se descuidan quizás por ignorancia principalmente en las zonas rurales, donde siempre ha habido mucha deficiencia.
Dijo que ahora es que la población entiende la importancia de estar documentado.
Indicó que si en la escuela que dirige cerraran las puertas a todos los niños sin documentos entonces tendrían que cerrar el centro, fundado en 1978 y que acoge a 240 estudiantes desde el primero hasta el séptimo de la primaria.
Explicó que como allí no imparten el octavo grado cualquier pequeño puede estudiar. Expresó que él no puede cerrarle las puertas a alguien que quiera capacitarse.
Asimismo, el director de la escuela básica de la sección Salamanca, Domingo Valenzuela, dijo que en ese poblado está muy presente el problema de que niños y adultos no tienen documentos.
Reconoció que muchos niños no están declarados por descuidos de los padres, pero lamentó más que impidan estudiar a jóvenes y niños que así lo quieren.
Cuando se esparció la noticia de estaban haciendo un reportaje de los que no tenían "papeles", más de medio centenar de personas, entre niños y adultos se reunieron en la escuela de Salamanca para explicar sus casos particulares.
Se observó que algunos eran haitianos o de padres haitianos, quienes también pidieron algún tipo de registro para poder estudiar.
Pérez dijo que mantiene la esperanza de que el presidente de la JCE, doctor Julio César Castaños Guzmán, le cumpla la promesa que, asegura, le hizo el magistrado durante las consultas a la reforma constitucional.
Dice que no descansará, mientras que los residentes de Pedro Brand no hacen más que preguntarle, cada vez que la ven, sobre el estudio que ella hizo. Todo el que fue entrevistado espera pronto tener un papel que asiente en las memorias de la Nación que ellos tienen nombre y apellido.
Publicado en El Nacional
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