FUNDACIÓN ayuda jóvenes a mejorar y ser útiles a sociedad
POR SHIRA ABREU
Antes de cumplir la mayoría de edad, mientras cursa el tercero del bachillerato, Miguel Ángel Deschamps espera iniciar en un mes su empresa de vender zapatos. Ya diseñó y estructuró la compañía, tiene vendedores contratados, e incluso sabe qué márgenes de beneficios obtendrá. Tiene la seguridad de que se convertirá en un gran empresario del zapato.
Miguel Ángel aprendió en la práctica cómo organizar, dirigir, producir, mercadear y publicitar una empresa con un proyecto que desarrolló en nueve cursos del Politécnico Unión Panamericana, la Fundación Junior Achivement Dominicana con el auspicio de Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (Anje).
En ese centro educativo, cada una de las secciones formó una empresa, cada estudiante adoptó una función y cumplía con sus responsabilidades. Los jóvenes formaron empresas de venta de helados, donuts, chocolates, hot dogs, cócteles, tostadas, repostería y revistas. Distribuían los productos dentro del plantel y la mayoría tuvo altos márgenes de beneficios, aseguraron los estudiantes participantes.
La fundación ha capacitado en economía y negocios unos 26 mil estudiantes de básica y secundaria en los 12 años que comprende su trabajo en República Dominicana. Busca desarrollar el espíritu emprendedor en los estudiantes para que, además de que se motiven a ser empresarios, y como empleados desarrollen nuevas ideas y proyectos.
Esperan elevar de entre seis a nueve mil que capacitan anualmente, a 50 mil cada año, indicó el director ejecutivo de esa entidad, ingeniero César Asiático.
Miguel Ángel cree que la capacitación que recibió en un mes, en la que su curso desarrolló una empresa de venta de sandwiches, le servirá muchísimo en su proyecto futuro de venta de zapatos.
La fundación se propone desarrollar el espíritu emprendedor en la juventud, fomentando el ejercicio de la responsabilidad social de las empresas. Basándose en proyectos educativos que se imparten de forma gratuita en las escuelas, con financiamiento total de empresas patrocinadoras, y semifinanciado en los colegios, en los que los padres de los participantes contribuyen con 550 pesos cada uno.
Algunas de las máximas que transmiten a los estudiantes desde primer curso en adelante es que el futuro dependerá de lo que hagan en el presente. Insisten en que la perseverancia es la clave del éxito y que los fracasos sólo son oportunidades para futuras victorias, aseguraron estudiantes el Politécnico Unión Panamericana.
Los facilitadores son funcionarios de las empresas miembros de la fundación y padres voluntarios.
Los programas van desde el primer curso, en los que explican que cada persona es responsable de su propio bienestar. Incentivan la costumbre del ahorro y hacen prácticas bancos con uso de alcancías. Asiático resalta que lo que marca la diferencia entre “Junior” y otras entidades es que ellos enseñan jugando.
En tanto, el director de programas educativos, licenciado Francisco Yuli, relató que una vez uno de los niños robó el capital de su “banco”(alcancía), lo que provocó que éste fuera a la quiebra y que todos los niños hijos de los empleados de ese banco fueran expulsados de los colegios en que supuestamente estudiaban porque los padres quedaron sin trabajo. Dijo que esa experiencia le permitió al facilitador abordar el tema de las consecuencias que un acto delictivo acarrea a la sociedad y a las empresas.
Miguel Ángel aprendió en la práctica cómo organizar, dirigir, producir, mercadear y publicitar una empresa con un proyecto que desarrolló en nueve cursos del Politécnico Unión Panamericana, la Fundación Junior Achivement Dominicana con el auspicio de Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (Anje).
En ese centro educativo, cada una de las secciones formó una empresa, cada estudiante adoptó una función y cumplía con sus responsabilidades. Los jóvenes formaron empresas de venta de helados, donuts, chocolates, hot dogs, cócteles, tostadas, repostería y revistas. Distribuían los productos dentro del plantel y la mayoría tuvo altos márgenes de beneficios, aseguraron los estudiantes participantes.
La fundación ha capacitado en economía y negocios unos 26 mil estudiantes de básica y secundaria en los 12 años que comprende su trabajo en República Dominicana. Busca desarrollar el espíritu emprendedor en los estudiantes para que, además de que se motiven a ser empresarios, y como empleados desarrollen nuevas ideas y proyectos.
Esperan elevar de entre seis a nueve mil que capacitan anualmente, a 50 mil cada año, indicó el director ejecutivo de esa entidad, ingeniero César Asiático.
Miguel Ángel cree que la capacitación que recibió en un mes, en la que su curso desarrolló una empresa de venta de sandwiches, le servirá muchísimo en su proyecto futuro de venta de zapatos.
La fundación se propone desarrollar el espíritu emprendedor en la juventud, fomentando el ejercicio de la responsabilidad social de las empresas. Basándose en proyectos educativos que se imparten de forma gratuita en las escuelas, con financiamiento total de empresas patrocinadoras, y semifinanciado en los colegios, en los que los padres de los participantes contribuyen con 550 pesos cada uno.
Algunas de las máximas que transmiten a los estudiantes desde primer curso en adelante es que el futuro dependerá de lo que hagan en el presente. Insisten en que la perseverancia es la clave del éxito y que los fracasos sólo son oportunidades para futuras victorias, aseguraron estudiantes el Politécnico Unión Panamericana.
Los facilitadores son funcionarios de las empresas miembros de la fundación y padres voluntarios.
Los programas van desde el primer curso, en los que explican que cada persona es responsable de su propio bienestar. Incentivan la costumbre del ahorro y hacen prácticas bancos con uso de alcancías. Asiático resalta que lo que marca la diferencia entre “Junior” y otras entidades es que ellos enseñan jugando.
En tanto, el director de programas educativos, licenciado Francisco Yuli, relató que una vez uno de los niños robó el capital de su “banco”(alcancía), lo que provocó que éste fuera a la quiebra y que todos los niños hijos de los empleados de ese banco fueran expulsados de los colegios en que supuestamente estudiaban porque los padres quedaron sin trabajo. Dijo que esa experiencia le permitió al facilitador abordar el tema de las consecuencias que un acto delictivo acarrea a la sociedad y a las empresas.
Plan de estudios
El programa es un plan de estudios secuencial, en principio el objetivo es que los infantes conozcan su rol en la sociedad como productores, consumidores, trabajador y cómo aplicar los conocimientos para generar fuentes de riqueza.
En segundo curso el tema principal es cómo el individuo puede contribuir en la familia para hacer de ésta un mejor lugar para vivir. Abordan el significado de necesidad y deseo, e identifican la diferencia entre ellos, explicó Yuli.
Dijo que en tercero abordan el tema de la comunidad en relación con la familia y cómo el individuo puede contribuir a su comunidad. Asimismo delimitan el rol del Gobierno y los negocios dentro de la comunidad.
El programa de la fundación, que nació en Estados Unidos en 1919 por iniciativa de empresarios y se aplica actualmente en 112 países, llega a los colegios por invitación que éstos hacen a la fundación.
Otro de los programas que desarrolla la fundación es “socio por un día”, el objetivo es que el estudiante conozca cómo se desarrollan en la práctica las empresas y trabajando todo un día con el encargado del departamento del área del interés del estudiante.
“Gracias expertos de la universidad de Harvard y del Instituto de Massachusetts, éste programa cuenta con una metodología sencilla y fácil”, apuntó Yuli.
Dijo que ese sistema viene a llenar el vacío que dejan los curriculums académicos tradicionales que generalmente no abordan el tema de educación financiera. “Cuantas personas hay que no saben manejar una tarjeta de crédito, porque carecen de educación financiera. Cuando las personas reciben esta capacitación, no necesariamente tiene que ir a la universidad a estudiar administración y economía.”
Asegura que todas las personas, ya sean ingenieros o abogados necesitan educación financiera para administrar su empresa, vida y familia.
Entiende que el que maneja esos conocimientos tiene mayores oportunidades de crecimiento, además de que desarrolla la actitud emprendedora, que le permite levantarse tras caer en reiteradas ocasiones.
Por su parte Asiático resaltó que el programa le permite al empresario acercase a su comunidad y practicar la responsabilidad social empresarial.
Las principales empresas patrocinadoras son la Asociación de Jóvenes Empresarios (Anje), el Banco Popular, J. J. Roca, la Cámara Americana, Banco Ademi, Citibank, Grupo Ramos, Continetal Airlines, entre otras.
El programa es un plan de estudios secuencial, en principio el objetivo es que los infantes conozcan su rol en la sociedad como productores, consumidores, trabajador y cómo aplicar los conocimientos para generar fuentes de riqueza.
En segundo curso el tema principal es cómo el individuo puede contribuir en la familia para hacer de ésta un mejor lugar para vivir. Abordan el significado de necesidad y deseo, e identifican la diferencia entre ellos, explicó Yuli.
Dijo que en tercero abordan el tema de la comunidad en relación con la familia y cómo el individuo puede contribuir a su comunidad. Asimismo delimitan el rol del Gobierno y los negocios dentro de la comunidad.
El programa de la fundación, que nació en Estados Unidos en 1919 por iniciativa de empresarios y se aplica actualmente en 112 países, llega a los colegios por invitación que éstos hacen a la fundación.
Otro de los programas que desarrolla la fundación es “socio por un día”, el objetivo es que el estudiante conozca cómo se desarrollan en la práctica las empresas y trabajando todo un día con el encargado del departamento del área del interés del estudiante.
“Gracias expertos de la universidad de Harvard y del Instituto de Massachusetts, éste programa cuenta con una metodología sencilla y fácil”, apuntó Yuli.
Dijo que ese sistema viene a llenar el vacío que dejan los curriculums académicos tradicionales que generalmente no abordan el tema de educación financiera. “Cuantas personas hay que no saben manejar una tarjeta de crédito, porque carecen de educación financiera. Cuando las personas reciben esta capacitación, no necesariamente tiene que ir a la universidad a estudiar administración y economía.”
Asegura que todas las personas, ya sean ingenieros o abogados necesitan educación financiera para administrar su empresa, vida y familia.
Entiende que el que maneja esos conocimientos tiene mayores oportunidades de crecimiento, además de que desarrolla la actitud emprendedora, que le permite levantarse tras caer en reiteradas ocasiones.
Por su parte Asiático resaltó que el programa le permite al empresario acercase a su comunidad y practicar la responsabilidad social empresarial.
Las principales empresas patrocinadoras son la Asociación de Jóvenes Empresarios (Anje), el Banco Popular, J. J. Roca, la Cámara Americana, Banco Ademi, Citibank, Grupo Ramos, Continetal Airlines, entre otras.
Colegio Lux Mundi
La directiva de la escuela básica del Colegio Lux Mundi resaltó el trabajo que realizó en abril Junior Achivement en el colegio. En esa oportunidad los estudiantes de cuarto de primaria montaron un restaurante, asistidos por padres de los propios estudiantes del centro que se ofrecieron como voluntarios para el proyecto, y fueron entrenados por la fundación para impartir la capacitación.
Indicaron en nota de prensa que es el quinto año consecutivo en que aplica el proyecto y que sirve como herramienta innovadora y como una gran oportunidad para despertar la creatividad en los docentes “quienes aprovechan el contenido de esas sesiones para aplicarlas en las demás áreas del saber”, apunta del documento.
Agrega que por segundo año consecutivo los estudiantes de undécimo curso se sumaron como voluntarios a un proyecto que lleva “Junior” a la escuela Francisco del Rosario Sánchez, donde los propios alumnos sirven como facilitadores.
La directiva de la escuela básica del Colegio Lux Mundi resaltó el trabajo que realizó en abril Junior Achivement en el colegio. En esa oportunidad los estudiantes de cuarto de primaria montaron un restaurante, asistidos por padres de los propios estudiantes del centro que se ofrecieron como voluntarios para el proyecto, y fueron entrenados por la fundación para impartir la capacitación.
Indicaron en nota de prensa que es el quinto año consecutivo en que aplica el proyecto y que sirve como herramienta innovadora y como una gran oportunidad para despertar la creatividad en los docentes “quienes aprovechan el contenido de esas sesiones para aplicarlas en las demás áreas del saber”, apunta del documento.
Agrega que por segundo año consecutivo los estudiantes de undécimo curso se sumaron como voluntarios a un proyecto que lleva “Junior” a la escuela Francisco del Rosario Sánchez, donde los propios alumnos sirven como facilitadores.
Comentarios