"Los cocodrilos no doblan"


POR SHIRA ABREU
Alarma ha causado en Pantoja, al oeste de Santo Domingo, y en La Barquita, en Los Mina, la presencia de entre dos a ocho cocodrilos en los ríos Isabela y Ozama, que al parecer escaparon durante la tormenta Noel de un criadero que algunas personas aseguran existe en Mata Mamón, entre La Victoria y San Luis.
Rafaela Rizik, residente en Pantoja, dijo haber visto el jueves dos cocodrilos grandes y entre seis u ocho pequeños a orillas del río Isabela, próximo al puente que lleva a la carretera que va a La Gina.
Rizik dijo que los reptiles fueron vistos en un pozo pequeño cerca del río, donde al parecer acuden a calentarse.
El médico Francisco Monegro, propietario de una finca que colinda con el río Isabela, reveló que el pasado sábado acudió a su propiedad a llevar un tanque de agua cuando vio un cocodrilo calentándose cerca de la piscina.
Relató que cuando descargaba el tanque de agua oyó un ruido que lo asustó y al mirar hacia la piscina vio al reptil de más de un metro de largo, tirado en el piso soleándose.
Cuando trató de acercarse al animal, unas personas que estaban mirando desde el puente le alertaron, el cocodrilo huyó hacia el río Isabela y se mantuvo en el agua durante dos horas y media.
Mientras tanto un gentío lo observaba y le tiraba piedras desde el puente que cruza sobre el lugar.
El médico dijo que dos hombres lo querían atrapar y amarrar con una cuerda y el reptil salía y entraba al río mientras más gente se congregaba para observarlo.
Monegro llamó a las autoridades a tomar medidas para evitar una desgracia ya que en el río Isabela se bañan personas, otras se abastecen de agua y algunas lavan la ropa. “Ahora mismo la población aquí está alarmada”, expresó Monegro.
Consideró que los que corren más peligro por los grandes reptiles merodeando la zona serían los niños, que regularmente se bañan y juegan en el río, que está poco a poco volviendo a su normalidad después de que se desbordara en algunas zonas de Pantoja.
Informó que tiene programada para mañana una actividad con sus dos hijos y otros miembros de su familia, pero tiene algo de temor de que el animal aparezca otra vez.
Mientras el motoconchista Johnny Cornielle (Azulito) dijo que después de la tormenta tropical Noel ha visto dos cocodrilos en más de una ocasión en Pantoja, a orillas del río Isabela.
Cornielle asegura que uno de los cocodrilos es grande y el otro más pequeño.
“Uno me llega como hasta aquí”, expresó, indicando con su mano que el cocodrilo le llega hasta el pecho. “Azulito” mide casi seis pies.
La ultima vez que vio a los reptiles fue anteayer. Cree que ya se movieron río abajo.
Otros consultados dijeron que no han visto a los animales.
Todos los entrevistados coincidieron en que es la primera vez que un cocodrilo merodea por allí.

Sin miedo
“Yo no le tengo miedo porque ese es un animal que... un “peje” que no dobla. El cocodrilo no dobla (al caminar) él coge derecho, entonces uno tiene defensa, uno dobla”, dijo el vigilante Antonio Rosario, de 69 años, con mucha “valentía”, ante un posible ataque del reptil.
Rosario es el guardián y ayudante en la finca del doctor Monegro, pero no ha visto al cocodrilo.
“Dicen que hay uno más grande que yo”, expresó el hombre que mide al rededor de cinco pies de altura.

En La Barquita
En el sector La Barquita, de Los Mina, decenas de personas dijeron, en la semana de la tormenta Noel, haber visto un cocodrilo que se calentaba sobre el techo de una vivienda que estaba inundada hasta la parte superior a orillas del río Ozama.
El reptil fue visto tres días después de la tormenta, provocando pánico entre los refugiados de ese sector, algunos de los cuales rehusaron volver a sus viviendas por temor al animal
Otros dos cocodrilos fueron vistos también a orillas río Ozama en las inmediaciones del puente Francisco del Rosario Sánchez, en los sectores Las Lilas, Los Tres Brazos y en las proximidades del dique de Félix Benítez, cerca del barrio de Las Enfermeras.
Algunas personas residentes en La Barquita, Los Tres Brazos y Las Lilas aseguraron que los cocodrilos habían escapado de un criadero a cargo de varios chinos, en la comunidad de Mata Mamón, entre La Victoria y San Luis.
Empero tal versión no ha podido ser confirmada.
Las fotos son de personas que aseguran vieron los cocodrilos en el río Ibabela, en Pantoja. Excepto el mayor de todos, Antonio Rosario, que es quien jura que los cocodrilos no doblan. Claro, muchos compañeros de trabajo mios concuerdan con él.
El moreno es "Azulito", nombre que según cuenta jocosamente se debe a que su motor es azul.
Y el de la camisa amarilla es el doctor Monegro, en cuya finca él encontró al cocodrilo saleándose.
El trabajo fue publicado en EL Nacional

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